“A mi estimado profesor Manuel Barros Monge:
Corría el año 98 y en Hontaneda nos iniciamos en la fisiopatología.
El doctor Barros fue un pionero en la enseñanza basada en casos clínicos. Nos regaló una mirada única para comprender la forma en que las enfermedades afectaban al ser humano y cómo cada síntoma y signo tenían su explicación en el análisis de receptores, canales, segundos mensajeros, citoquinas y sobre todo el famoso interferón que nos ayudaron a comprender el funcionamiento del cuerpo humano desde los órganos y sistemas.
Años después me correspondió ser ayudante de su cátedra y conocí su rigurosidad y generosidad en la entrega del conocimiento, destacando su gran compromiso docente.
Ya egresado compartimos en sus años de secretario académico de la Escuela de Medicina de la Universidad de Valparaíso y en el Hospital Carlos Van Buren.
Dirigió un innovador proyecto Mecesup “Educación médica integrada, flexible y a lo largo de la vida” que ha sentado las bases a los cambios curriculares de la escuela de medicina.
Durante la pandemia fue uno de los referentes clínicos quien nos dio luces claras sobre el SARSCOV2.
Excelente médico internista, especialista broncopulmonar, formador de cientos de especialistas en la región y el país, investigador y comunicador científico.
Tan pronto ha partido nuestro profesor Manuel Barros. Un maestro que seguirá con nosotros cada vez que intentemos desentrañar la causa de las enfermedades. Un colega entrañable y que al ejercer la medicina le dio prestigio y sapiencia a la profesión médica.
Hoy como colegio médico nos sumamos a las muestras de afecto por tan querido médico, profesor, maestro y amigo.
Descanse en Paz, gran maestro y líder don Manuel Barros Monge”.